martes, 18 de noviembre de 2014

El Museo del Oro, cuna de historia

Casa de la Aduana- Santa Marta- historias relatadas en un mismo lugar.


Por: Adriana Serpa

Museo del Oro Tairona
En el transcurso de los años, el ser humano  no ha apreciado la riqueza de la cultura magdalenense, y mucho menos sobre la historia que hay detrás de cada rincón de este departamento.
La cultura es esencial en la vida de cada uno de los seres humanos, conocer de dónde vinimos, cuál es  nuestro pasado, cómo llegamos, de dónde llegamos, nos hace personas sabias e interesadas en saber quiénes somos. 

En la ciudad de Santa Marta, en la calle Segunda con carrera 14 en una esquina pintoresca y visitada por los turistas, se encuentra ubicada la Casa de la Aduana, en donde en su interior está el Museo del Oro,  allí  están  recopilados años de cultura de la Sierra  Nevada de Santa Marta, del Magdalena y de la ciudad en si.   Los cuales están expuestos a la luz pública para que las personas conozcan de sus raíces y los extranjeros de nuestra cultura e historia.

Más que un museo una historia rescatada

Las vivencias, los recuerdos, nuestros antecedentes, nuestra historia, todo en un solo lugar. 

Por: Yiseth Rodríguez



La  gente de la Sierra Nevada de Santa Marta 

La Sierra Nevada de Santa Marta es la cuna de los Tairona, los más representativos del país, concentra la sabiduría de la naturaleza y la indígena. Cada paso hacia su interior es un encuentro con una belleza y exuberante  únicas en el mundo.  Los diversos pueblos indígenas se comunicaban por medio de caminos de piedra. Habitaban bohíos circulares sin ventanas y con techos de palma sobre terrazas de piedra.

La cultura que habitó la Sierra Nevada, antes de la llegada de los españoles y la Colonia, fue la Tairona. Con la conquista, su población de alrededor un millón de personas disminuyó hasta desaparecer. Hoy, sobreviven cuatro comunidades indígenas que conservan diversas tradiciones ancestrales y que suman alrededor de 30 mil personas entre los Koguis, los Arhuacos, los Wiwas y los Kankuamo.

Viajando por el pasado

El pasado sábado 25 de octubre abrió sus puertas al público en Santa Marta el Museo del Oro Tairona - Casa de la Aduana, un regalo del Banco de la República para todos los colombianos.

Por: Ana Lozano 


Museo del Oro Tairona- Casa de la Aduana 

Caminar, observar, deleitar nuestra mente con tan excelente información que en los pasillos de cada sala explorada encontraban en cada imagen o monumento la historia que muchos no conocen de nuestro país Colombia. Al entrar en ese mundo mágico donde se chocan con personajes que realizaron hermosas prendas y objetos, para subsistir, que hoy en día son tan valiosas y apetecidas por el público para admirar la firmeza que proyectaron nuestros descendientes y nos brindaron ideas para mejorar en la orfebrería y   en los vestuarios que habitualmente usamos.

La Casa de la Aduana  es la que recoge la memoria de Santa Marta y su región. Esta sala nos sirve de espacio para aprender más sobre la historia del Magdalena desde el período de la conquista, la figura de Don Rodrigo de Bastidas, las expediciones conquistadoras que surgieron desde Santa Marta al resto del país. Si pudiera hablar, nos contaría sobre los sucesos con los piratas y sus constantes saqueos e incendios  y nos narraría un poco de los conquistadores y  esclavos que fueron partícipes de tan importantes eventos.

lunes, 17 de noviembre de 2014

Historias, leyendas, mitos y etnias culturales del Magdalena

Una zona de encuentro, de reflexión y diálogo sobre la vida de las personas que hacen parte de la Sierra Nevada de Santa Marta  y de la región Caribe, durante los últimos 2.000 años.  

Por: Gehannys Ruiz




Vestimenta y accesorios de los Arthuaco o Wintukua.


La Sierra Nevada de Santa Marta, actualmente está conformada por cuatro pueblos indígenas, los cuales son: Koguí, Arthuaco o Wintukua, Wiwa o Arsario y Kankuamo. La concepción que poseen estas comunidades es de suma importancia,  puesto que, ellos consideran que la Sierra Nevada  es el corazón del mundo y es una tierra sagrada de donde fluyen las fuentes de conocimiento y por tal razón, debe ser cuidada a través del respeto de los principios tradicionales y sobretodo espirituales.

Muy a pesar de que sus idiomas y sus vestimentas varían,  a ellos los une su visión de la creación y es una de las maneras por las cuales interactúan y  rigen una ley, la ley de Origen. Ley que está consagrada en cada esquina de la Sierra Nevada de Santa Marta, que guarda los principios y normas para la vida  material y espiritual de los indígenas.   

El comienzo de una mejor historia

Un lugar donde variadas voces hablan sobre el pasado y el presente del departamento del Magdalena.


Por: Yaneydis Mancera 


Parte exterior del Museo del Oro

La Casa de la Aduana, sitio simbólico del centro auténtico de Santa Marta, reabrió sus puertas el 25 de octubre del presente año. El nuevo Museo del Oro Tairona – Casa de la Aduana del Banco de la República, un lugar donde variadas voces conversan sobre el pasado y el presente del departamento del Magdalena.

Mejor organizada, restaurado detalle tras detalle y en las condiciones posibles mejoradas se encuentra actualmente el nuevo Museo del Oro Tairona – Casa de la Aduana en Santa Marta. Anteriormente la casa se encontraba en condiciones muy críticas y decepcionantes.

El Banco de la Republica dio un aporte importante para reconstrucción y transformación total a la renovación que inició la ciudad hace algunos años y que logró la salvación del centro auténtico para gracia de sus habitantes y como táctica para atraer al turismo nacional y extranjero que constantemente está en la ciudad.

Cuatro museos en uno solo

Un lugar de conocimiento y reconocimiento de la identidad de las personas del Magdalena.

Por: Loraine Orozco 



Museo del Oro.

En Santa Marta, una ciudad turística, una perla mágica que lo tiene todo, sol, playa, mar, arena entre sus casas arquitectónicas, esculturas, plazas y parques que la  embellecen; se encuentra la Casa de la Aduana, confiscada al gobierno español con la independencia de la ciudad, tras la batalla de Ciénaga el 10 de noviembre de 1820.

Funcionó como oficina del consulado de Cartagena entre 1823 y 1825, por lo que también fue llamada como casa del consulado. En 1830  se recibe al Libertador Simón Bolívar, enfermo y luego se trasladó a la Quinta de San Pedro Alejandrino donde fallece.

Fue declarada monumento nacional en 1970, y en 1979 el Banco de la Republica la adquirió para albergar allí el Museo del Oro Tairona, allí funcionó hasta el 2008, cuando las directivas se vieron obligadas a cerrar sus puertas para llevar a cabo la restauración del lugar  y fue así como  se trasladó a una sede temporal: la Biblioteca del Emisor en Santa Marta, vecina a la Casa, en donde funcionó hasta julio de 2014.

La “Seño” Doris

A sus 79 conserva intacta las ganas de enseñar con desde el primer día que inició, son cientos los niños que han pasado por su sala.

Por: Loraine Orozco

Dorís Orozco.

La educación representa el contacto de los niños con un entorno ajeno al hogar, siendo la primera oportunidad de socialización. Los lugares donde se lleva a cabo este proceso se conocen como jardines infantiles.
El verdadero profesor es aquella persona que orienta, aconseja y transmite conocimiento, exige a sus estudiantes para que esto sean positivos y útiles en la sociedad donde tengan que desenvolverse. No todos nacemos con ese don de transmitir conocimiento y lograr la expresión de ideas y sueños profundos que vienen acompañados de grandes retos  sin dejarse vencer por los obstáculos que la vida a diario nos presenta.

Más que riquezas materiales, tesoros históricos

Nuestros periodos de perfeccionamiento.


Por: Linda Romero



Museo del Oro.

El Museo de Oro de Santa Marta, casa cultural de dos pisos que fue reformada durante 6 años, y que abrió sus puertas a un sin número de curiosos el día 25 de octubre de 2014, ubicada entre las  calles históricas 14 y 1 C, esta galería nos muestra una gran variedad de riquezas aunque solo enmarque en su nombre “oro”.

Al ingresar a este lugar con poco aspecto de museo, sino de casa histórica de la ciudad, nos encontramos con el periodo Neguanje que abarca desde 200-900dC, donde se explica que en nuestra hermosa sierra nevada, rodeada de aguas cristalinas vitales para la ciudad; se encuentran 4 tipos de etnias diferentes y de igual manera la diversidad animal en esta zona.

En periodo de nuestros antepasados predomina la cerámica, se desarrollaron las técnicas y decoraciones, con preferencias por diseños curvilíneos e incisiones finas con trazos firmes, la mayoría de estas cerámicas eran en pigmentos rojos.

Museo del Oro- Casa de la Aduana: Un lugar de identidad cultural

Tras ocho años de extenso aguardo se hace entrega de este sitio en el que se hallan historias de nuestra ciudad y antepasados.

Por: Sherly Ariza 


‘El Morro’ uno de los símbolos que identifica a la ciudad.

Santa Marta, capital del departamento del Magdalena, fue la primera ciudad fundada en Suramérica, el 29 de julio de 1525 por el conquistador español; Rodrigo Galván de la Bastidas, siendo así la más antigua de Colombia. 
                      
La ciudad guarda entre sus plazas, monumentos y principales avenidas muchas historias, lugares donde acontecieron hechos que hacen que la capital magdalenense sea un baluarte de la memoria viva del país.   

‘La Perla de América’ es una de las ciudades turísticas más atractivas de Colombia, pues se encuentra en una zona costera y es muy famosa por sus hermosas playas, pero también encierra atractivos culturales, por ejemplo: el recién restaurado Museo del Oro Tairona- Casa de la Aduana.

Al son de la acordeón y al ton del tambor, Andrés “El Turco” Gil

Una de las mejores academias de la región, actualmente ubicada en la calle 31 Nº 4 – 265, en el barrio Los Mayales. 

Por: Gehannys Ruiz


Maestro Andrés Eliécer Gil Torres.

El maestro Andrés Eliécer Gil Torres, nació en Villanueva-Guajira, el 30 de octubre de 1948. Un hogar formado por Juan Manuel Gil, quien tenía una de las mejores orquestas de la región, y Luisa Torres, hermana de Reyes Torres, un gran músico y muy reconocido en toda la región Caribe. No cabe duda que nació en una nación de cantores y que el arte de la música corre  por sus venas, puesto que proviene de una familia con grandes movimientos en el ámbito musical.

Más conocido como  “El Turco”, el cual viene de una expresión que lanzó su abuelo cuando lo tuvo por primera vez en sus brazos, muy a pesar de que su físico no era nada parecido a la de un turco, pero su abuelo al verlo expresó inmediatamente:  "parece un turco". Expresión que se regó por el pueblo y así comenzó  a propagarse, hasta el  punto que se convirtió en su nombre artístico y actualmente representa a un gran maestro de la música que ha hecho un  trabajo fenomenal con la cultura vallenata.

El “renacer” del callejón del correo

En el 2010, en Santa Marta, renace la calle 17 con carrera tercera. Con un ambiente gastronómico se hace la inauguración de Lulo Café - Bar, donde los platos son muy variados y ofrecen una mezcla sutil de sabores y texturas, para foráneos y natales.

Por: Sherly Ariza 

Logo Lulo Café Bar.

Una pareja de esposos deciden establecerse en la ciudad e inician este nuevo proyecto. Ambos sienten pasión por la buena comida y por las combinaciones de colores; aunque ninguno de los dos es chef de profesión, comparten ese gusto por las estructuras y mezcla de matices en la cocina.

Fuimos el primer restaurante de esta calle, pero desde el año pasado han ido abriendo otros locales con conceptos gastronómicos diferentes, lo cual nos agrada, porque así hay más afluencia de personas, tanto locales como turistas y eso nos obliga a mejorar nuestro servicio, pues la competencia es cada vez mayor”. Afirma David Álvarez, propietario de Lulo Café Bar.

La idea del nombre del restaurante Lulo nació porque al llegar a Colombia notaron la gran variedad de frutas que aquí encontraron, pero fue a su llegada a Santa Marta que empezaron a explorar y conocer de la cultura costeña. “Al llegar a Santa Marta y con el transcurrir del tiempo decidimos que el lugar que queríamos abrir y lo que queríamos transmitir con él es que fuera algo muy tropical, donde se comunicara la idea de que estábamos en el Caribe. Y al recordar todas esas frutas que habíamos probado ambos concluimos que la fruta más refrescante para el clima samario era el lulo, por eso el nombre del restaurante”. Comenta Melissa Ford, co-propietaria del lugar y esposa de David Álvarez. 

El paraíso desolado

Playa, brisa, mar  es lo que muchos conocen del corregimiento que queda a menos de 10 minutos de Santa Marta. 

Por: Ana Milena Lozano 



Tagangueros en plena actividad pesquera.


Bello paisaje, deliciosa comida, diferentes tipos de culturas, esto es lo que te encuentras al visitar Taganga. Pero ¿qué significa para los nativos? Personas que día tras día se levantan a trabajar para poder cubrir sus necesidades, que mientras unos disfrutan y gozan de sus playas ellos tratan de buscar clientes para tener al final del día un buen pago, esas  personas que cuando pasas te encargas de ignorarlas porque como todo en la vida, solo te importa lo que pase contigo.

Es el caso de Farid Antonio Márquez  un pescador que tiene cerca de 35 años de dedicarse a esta labor con la que ha sacado adelante a su familia, quienes solo dependen del sustento de Farid.

“La jornada comienza a las cinco de la mañana y termina a las cinco o seis de la tarde, o sea que nosotros laboramos en el día, 12 o 13 horas. Este trabajo es diurno. Somos una red de ‘chinchorreros’ que fue creada en el pueblo aproximadamente hace dos siglos”. Expresó Márquez.

Cultura Wayú: tradición, respeto y trabajo

La dedicación y el acatamiento por lo que hacen, es una de las razones fundamentales  que forjan de estos  indígenas algo único y original, a la hora de mostrar  lo que son y lo que hacen en una ciudad, distinta  a la de ellos. 

Por: María Antonia Zabaleta 


Vendedoras Wayú. A la derecha: Carmen Alicia Palacios Jusayú. A la izquierda: Nancy Amaya Gonzales.


Hablar de esta cultura es para muchos un tema que se convierte en atracción y asombro, puesto que detrás de estas mantas, un rostro de apariencia malgeniada y una mirada que se pierde al hilo de sus puntadas, podemos encontrar un ser humano maravilloso que hace de su labor un don de admirar, pues vivir de lo que forjan, los hace ser distintos al defender y sobrevivir cada día de su propio trabajo.

Teniendo en cuenta que Santa Marta es una ciudad  para los turistas, es de asombro ver que no solo los exploradores de cualquier región o país pueden sobre vivir de ella,  pues al caminar por una de las calles más céntricas, nos encontramos con familias wayú, que muestran día a día, todo lo que tradicionalmente tienen y venden a personas que se enamoran de su trabajo.

Más que una casa colonial

Desde el 2008 este lugar representativo para la ciudad, cerró sus puertas con el objetivo de realizar una rigurosa restauración, el 25 de Octubre del presente año el Monumento Nacional  hizo la reinauguración.


Por: Ana Escalante 

Periodo Nehuange

El Museo del Oro Tairona -  Casa de la Aduana del Banco de la República, durante seis años con la colaboración de historiadores, antropólogos, arquitectos, arqueólogos, entre otros, realizaron la restauración de toda la edificación con el fin de atraer al turismo y así seguir mostrando de forma didáctica nuestra cultura.  

Esta casa fue declarada Monumento Nacional por el Ministerio de Cultura. Se conmemora que el Libertador Simón Bolívar fue huésped y al fallecer, allí se realizó su funeral. Con su ubicación estratégica, se podía observar el movimiento del puerto y la producción del banano. A simple vista desde sus balcones se ve  nuestro mágico morro, que de una u otra manera fue una guía para la llegada de los piratas y conquistadores.

Actualmente la casa museo tiene una nueva dinámica, donde las guías realizan la presentación de cada una de las salas y así las personas pueden observar detalladamente y puedan explorar. Todas estas nuevas estrategias hacen que el recorrido sea más divertido y la forma como están divididas sus cuatro salas temáticas que fueron diseñadas con la ayuda de la comunidad, lo convierte visualmente muy atractivo y a la vez con un ambiente más fresco. Cabe resaltar que su ingreso es totalmente gratuito.

jueves, 6 de noviembre de 2014

Restauración del Museo del Oro Tairona

El lugar, ubicado en la Casa de la Aduana de Santa Marta, se encontraba cerrado desde 2008.

Por: Daniela De La Rosa 




Casa de la Aduana.

El 25 de octubre  de 2014 el Museo del Oro abre sus puertas en la ciudad de Santa Marta. Presenta cuatro salas de exhibición divididas en sociedades prehispánicas, La gente del Magdalena, historias desde la Casa de la Aduana y Bolívar estuvo aquí; logrando que las historias del pasado dialoguen con el presente para que los visitantes reconozcan y disfruten su patrimonio y diversidad cultural.

Cuenta con 471 piezas prehispánicas (207 de orfebrería, 86 de cerámica, 9 de hueso, 18 de concha y 151 de piedra);  53 objetos etnográficos y 41 coloniales, estos últimos encontrados durante las excavaciones arqueológicas que se realizaron en la Casa.

El lugar fue sede del Museo del Oro desde los 1980 hasta el 2008, puesto que por problemas estructurales de construcción fue desmontado y trasladado al Banco de la Republica.
El Banco de la Republica financió  la trasformación total del museo; desde su parte externa se puede apreciar las nuevas columnas de madera, el tejado y demás detalles que llenan de vida el lugar y en su parte interna el nuevo piso, los balcones y las vitrinas de exhibición.

martes, 4 de noviembre de 2014

El inicio de una nueva muestra de arte

Comparte los objetos recuperados en excavaciones arqueológicas y luego introduce sucesos y procesos ocurridos desde la fundación de la ciudad hasta el día de hoy.

Por: Yei Alfaro 

Obras orfebres que reposan en el Museo del oro Tairona.

Luego de estar sometido a un proceso de restauración y adecuación, el Museo del Oro Tairona y Casa de la Aduana, abre nuevamente las puertas a todos los samarios y visitantes para que vivan la experiencia de relacionarse con la historia y los antepasados.
Este Museo nos brinda la oportunidad de ver un arte, que fue hecho por antiguas culturas indígenas de la región del Magdalena, dedicada a la arqueología de la Sierra Nevada de Santa Marta en los periodos Nahuange, lo que colecciona todas esas maravillosas cosas que existieron en ese tiempo del desarrollo de una de las primeras comunidades de orfebres, pescadores y agricultores de la región del norte de Colombia.

Wayúu: una cultura que se está desvalorizando

Entre los vendedores de esta atractiva tradición indígena, crece la preocupación en las ventas de sus artesanías. 

Por: Ana Escalante 

Mochilas Wayúu


Carmen Alicia Palacio y Nancy González, son indígenas wayúu que llegaron hace 18 años a Santa Marta para mostrar las artesanías de su tierra como: mochilas, pulseras, sandalias, chinchorros, collares, aretes, pulseras, hamacas, mantas entre otros. Siendo este su diario  vivir.

Otro de los factores por el que están aquí, es la cantidad de turistas que llegan en la temporada de vacaciones y para ellas esto es muy provechoso en sus ganancias. Se ubican en el callejón que está por la Biblioteca del Banco de la República, todos los días de 7 a.m hasta las 7 p.m., se colocan en las calles por lo que no tienen que pagar ni un centavo.

La noche es larga y culebrera



"siéntanse seguros de que ese es su ritmo, pongan cara de champeteros y caminen estrafalarios para que no se vean tan niños ricos,  ni parezcan chicharrón en ajiaco",decía Miguel, un cartagenero de nacimiento para que no nos miraran feo. 

Por: Juan de la Ossa  

Posando con Mr Black 


Eran las siete de la noche y algo más del pasado Domingo 28 de Septiembre, cuando el padre de la Iglesia La Trinidad de Getsemaní en Cartagena, dice que nos podíamos ir en paz, durante la ceremonia y mientras tomaba de la mano a María Angélica, mi novia, no hice otra cosa que pedirle al padre celestial protección y por supuesto que nos alejara de todo aquello que no era digno de un cristiano.

De repente y transcurriendo sólo un unos minutos desde que salía del encuentro religioso, el universo en complicidad con lo mundano parecieran no estar satisfechos con mi purificación y se valen de Lina, una prima cartagenera que por cosas del destino me invitaba un rato a casa de sus amigos catalanes, en ese mismo sector que guarda en su arquitectura la historia esclava y española pero sobre todo el componente que hace mágico al ‘corralito de piedra’. 

El pabellón de rehabilitación

Problemas psiquiátricos y drogadicción en la ciudad de Santa Marta.

Por: Daniela de la Rosa





En el mundo, 450 millones de personas padecen algún tipo de trastorno, produciendo que los países desarrollados adopten modelos de intervención y tratamiento de las enfermedades mentales dentro del núcleo de la comunidad, las cuales ayudan a los pacientes y disminuye el estigma de los que son objeto. Esta concepción de la enfermedad mental ha respondido a políticas nacionales y disposición de recursos para la promoción de la salud y la atención oportuna y clínicamente orientada de las enfermedades mentales disminuyendo el impacto de esta enfermedad.

El derecho a la salud es considerado como un derecho fundamental y está consignado en la Carta Magna en su artículo 49. “La atención de la salud y el saneamiento ambiental son servicios públicos a cargo del Estado. Se garantiza a todas las personas el acceso a los servicios de promoción, protección y recuperación de la salud”.

Bello Horizonte, el nuevo fenómeno turístico en Santa Marta

La ciudad se ha caracterizado por ser unas de las urbes más visitadas por los turistas colombianos y extranjeros, gracias a su diversidad gastronómica, cultural y natural. 

Por: Néstor Zambrano


Playas de Bello Horizonte.

“En una playa dormida, bajo una Sierra sagrada, la tarde luce vestida de mil estrellas doradas; hay una perla andaluza sobre la arena plateada y un mar azul que se arrulla con su belleza encantada”, esta es una de las estrofas de la canción ‘La Perla’ del samario Carlos Vives, en donde hace un homenaje a su tierra natal, a la Santa Marta de su amores, a la esquina mágica del Caribe colombiano.

Santa Marta es la primera ciudad fundada en Colombia, su paraíso tropical la ha distinguido y le ha otorgado el honor de recibir turistas enamorados de las playas calientes, de la imponente Sierra que se levanta con sublimidad, de las aves que abrazan el viento, de las aguas que reflejan el azul radiante del cielo, de todo el encanto que encierra la ciudad de Carlos ‘el pibe’ Valderrama y de Radamel Falcao García, la ciudad de todos los colombianos.

Ataque Pirata en Santa Marta

Arturo E. Bermúdez es quien se encarga de la investigación histórica de la invasión de los bucaneros en el Caribe colombiano.

Por: Karina Correa 


Piratas en Santa Marta.



Los datos de investigación acerca de los piratas que arribaron las costas del Caribe colombiano son algo escasos, pero aun así a través del libro de Arturo E.  Bermúdez, ‘Piratas en Santa Marta’, nos brinda la oportunidad de adentrarnos en la historia que marcó la ciudad de Santa Marta tras la invasión pirata entre los siglos XVI – XVII.

Aunque se les parezca, hay una gran diferencia entre piratas, corsarios, bucaneros y filibusteros. Los piratas eran delincuentes que robaban por cuenta propia a los barcos de las rutas comerciales, sin discriminar la nacionalidad o proveniencia de los barcos atacados.

Lo tuvo todo y lo perdió

Por: Adriana Serpa 



Flor Ester Martínez. Parque Simón Bolivar.


Flor Ester Martínez es una mujer alta, de tez morena, ojos claros, poseedora de un cabello negro encrespado y de buena figura; tiene unos 45 años más o menos, es oriunda de Santa Marta y ha sido víctima del dolor de la muerte y la oscura soledad.

Después de quedar sin compañía, Flor se fue a vivir con su tía por parte de madre a  Maicao, retomando allá sus estudios. Algunas personas suelen decir que todo tiempo pasado fue mejor; premisa que enmarca la vida de esta mujer: después de vivir cómodamente durante 3 años, de repente empezó a recibir malos tratos de su tía, encausando que a la corta edad de 16 años generara un comportamiento de rebeldía.

La invasión por piratas, una realidad vivida

Arturo Bermúdez contó lo que costó. 

Por: Leslie Marriaga


       Barco pirata.



La historia es considerada como una de las ciencias humanísticas que más utilidad le ha dado al ser humano, no sólo para conocer el acervo cultural de las diferentes civilizaciones que han pasado por la historia, sino también para permitirle construir su propia identidad, buscando y tomando datos de tiempos pasados que le faciliten más la elaboración de su propia idiosincrasia.

La piratería en la ciudad de Santa Marta fue una de las causantes de muchos derrumbes de casas, catedrales y demás. Los fuertes de piratas que se formaban venían con distintas intensiones, cada uno tratando de ganar y encontrar más cosas de valor que los demás, muchos querían solo destruir, otros robar y acabar con todo.

El sexo, más que un placer, un trabajo

Mujeres de la vida fácil, pero lo que nadie  se imagina es que no es fácil y mucho menos vida.

Por: Yiseth Rodríguez


Ricas, pobres, flacas, gordas, negras, todas son iguales y a la vez tan distintas, unas por placer, otras por necesidad y una minoría simplemente por salir de la rutina. Las fiestas, las calles y hasta sus hogares, son los puntos donde ellas ejercen su labor.

Según la Constitución Política de Colombia: toda persona tiene derecho a un trabajo y a una remuneración por su labor.
De hecho, las oportunidades de una mejor calidad de vida, son el sueño de toda persona y aunque no lo vean como un trabajo honesto, es el más complicado de todos, es desgastador, se consume la belleza y el estado físico. Lo peor es que todos los clientes no son iguales, unos buscan compañía, otros placer y muchos quieren maltratar, pero esas son las consecuencias de este trabajo.