A sus 74 años, ha
consolidado una carrera exitosa como escritor, dramaturgo, ensayista e
historiador.
Por: Luis Eduardo Barranco
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Guillermo Henríquez. Plaza del Centenario (Ciénaga).
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A través del tiempo, Ciénaga se ha convertido en el epicentro de múltiples historias que han alimentado su tradición cultural, dejando una huella indeleble en el transcurrir de las vidas de los moradores y visitantes de la ciudad.
Sus monumentos, situados en
el centro del municipio, esconden relatos, cuentos y leyendas dignas de ser
inmortalizadas bajo la coordinación de la tinta y el papel. No por nada,
Ciénaga fue ubicada por el Ministerio de Industria y Turismo en la lista de los
16 Pueblos Patrimonio de Colombia.
La riqueza cultural
irradiada por Ciénaga ha contribuido al surgimiento del más representativo de
sus personajes, el cual se ha encargado por años de atesorar y dar a conocer la
identidad de este pueblo de ensueño.
En los arreboles de la
bonanza bananera de Ciénaga, Madalena, nace el 10 de julio de 1940 Guillermo
Henríquez Torres, producto de la unión de Félix Henríquez y Helena Torres.
Guillermo, a inicio de los
sesenta termina el bachillerato. Inmediatamente se abre paso a la fría Bogotá,
donde intenta estudiar Sociología en la Universidad Nacional, pero no culminó
la carrera, por dedicarse al oficio de anticuario; profesión que le resultaba
más lucrativa. A finales de la misma
época, cuando alcanzó ahorrar los suficiente de su trabajo, fijó sus horizontes
a Barcelona, donde estudió teatro en la Escola D’ Art Dramatic Adriá Gual.
Los álbumes expuestos en su
residencia, están colmados de fotos y recortes de la prensa catalana,
confirmando su travesía por la península Ibérica. Los registros demuestran lo
que afirma Henríquez: “durante años pinté poco, hice bastante teatro con el
grupo Gogó de Barcelona y escribí el Cuadrado de Astromelias”.
En su travesía por España,
Guillermo conoce a Gabo por intermedio de uno de sus profesores catalanes,
consolidando una amistad que le garantizó un almuerzo los jueves en la casa
del que sería el futuro Nobel, y una visita puntual, que alimentaba un momento
propicio para charlar sobre la historia de las viejas familias de Ciénaga y
Santa Marta. Algunas historias sirvieron de inspiración para concebir ciertos pasajes de Cien Años de Soledad. La relación decayó según Henríquez, cuando la
noche del estreno del Cuadrado de Astromelias, Gabo manifestó no gustarle la
puesta en escena de la obra.
La mezquina muerte alcanzó
prematuramente a su padre, Félix Henríquez. Esto obligó a dramaturgo que
triunfaba en Europa a retornar a las calles salitrosas de Ciénaga. Para ese
entonces, el pueblo suplía con nostalgia los mejores años de la bonanza bananera
con el comercio de marihuana.
A su llegada, en la segunda
mitad de los sesenta, el joven intelectual, dramaturgo y escritor, empezó a
aventurarse en la docencia, dictando las cátedras de Historia del Arte y Teoría
Estética en el San Juan del Córdoba, colegio oficial de Ciénaga.
La visión que el mundo le
había brindado a Guillermo, le permitió tener una concepción de la cultura
artística, elemental para que, junto a
Elías Eslait, Hames A-Correa, Ángel Paz y otros de sus amigos, generaran
espacios culturales disponibles para toda la comunidad cienaguera.
Henríquez es autor de una
obra amplia y dispersa; inédita en buena medida. Abarca el teatro, la crónica
histórica, el cuento, la novela y la investigación cultural. Se destaca de toda
su obra literaria: "El Cuadrado de Astromelias” (1980) y “Marta Cibelina”
(1982), piezas significativas de su producción teatral; escritos que sustentan
las fragilidades, descarríos y alucinaciones de entorno social cienaguero
decaído, ligado sin remedio a viejos mitos de traspatio.
En la misma secuencia de
este teatro despampanante y satírico figuran sus cuentos: “Las Queridas del
Diablo”, “Historia de un Piano de Cola”, “El Jinete Azul”, “Las Lágrimas de la
Araña”, “Poster” y “A lo Oscuro Metí la Mano”.
“Estos relatos transgresores,
experimentales, carnavalescos, que celebran los esquinazos de la vida y los
cuales aguardan mejores ediciones, aparte de la atención de la crítica
personalizada, que apenas sí ha reparado en ellos”. Sostiene el dramaturgo
cienaguero, enaltecido al describir sus obras.
El pasado de 16 julio del
año en curso, Guillermo Henríquez Torres, ganó en Buenos Aires el premio Ana
María Agüero Melnyczuk, por su trabajo investigativo titulado: “Ciénaga en la
claves de Cien Años de Soledad”. En reconocimiento a su labor, el historiador
cienaguero recibió un diploma y la publicación del trabajo bajo el sello
editorial de Limaclara Ediciones, encargada de efectuar la premiación.
La investigación de Henríquez,
es un resumen de uno de sus libros: “El Misterio de los Buendía”, publicado en
2003 y reeditado en 2006. Para poder concursar le tocó reducir la extensión del
texto de más de 350 páginas a 58, con el objetivo de convertirlo en un ensayo
periodístico y de investigación literaria.
Según el tratado de Guillermo,
Ciénaga goza de ser la verdadera fuente de inspiración de Gabriel García
Márquez para concebir a Macondo en Cien Años de Soledad. Todo esto es posible,
porque el municipio le ayudó a solventar vacíos de forma en los relatos que se
encuentran consignados en la obra. Además, afirma que Gabo indujo pistas en el
libro, claramente percibidas cuando habla de la ciénaga, rasgo que puede
identificarse con el municipio.
“Si ustedes quieren averiguar quién es el coronel
Buendía, vayan a Ciénaga y averigüen la biografía del general Ramón Demetrio
Morán Henríquez”. Guillermo saca esta
frase de una conversación entre Alfonso Fuenmayor y el periodista suizo (sic) Werner
Herzog. Esta charla, motiva al intrépido
historiador a hacer una extensa investigación durante 40 años, sobre los
misterios que rodean el origen de la familia Buendía, ideada en el mundo de la
obra cúspide del Nobel. La cita, fue expuesta en la publicación del 18 de julio
del año en curso en El Heraldo, sobre el premio otorgado a Henríquez por su
trabajo investigativo.
Guillermo Henríquez, ha
consolidado su vida al arte y a la reconstrucción histórica de su ciudad natal.
Gran parte de su existencia, se ha enfocado en fortalecer su experiencia
literaria y cultural, a través de los relatos y vivencias mágicas que el Caribe
puede brindarle.
Hola. Muy interesante la reseña sobre este escritor de Ciénaga que no conocía. Nunca es tarde para leerlo. ¿Dónde pueden adquirirse sus obras? ¿Es posible contactar con él?
ResponderEliminarMuy agradecido
delagala(arroba)telefonica.net
Hola Juan te dejo el numero del señor Guillermo Henriquez 314 5136758
EliminarDonde puedo comprar su obra completa y el compendio con el que gano en Buenos aires el premio.
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